martes, 26 de enero de 2010

DOS COCHINILLOS, OCHO ZAMPONES Y UNA REGATA


22 VIERNES. 10:00
Dos lechones acabaron en el buche de ocho voraces y sedientos amigos. Uno elaborado con mucho esfuerzo y sacrificio por Guillermo; el otro por el popular cordon bleu Pepe's; vino de los Angeles; pan y más caldos de José María; cafés y licores. Uno mejor cocinado que el otro..., pero conjuramos silenciarlo. De la limpieza de la vajilla: no coment, pero, ¡pardiez!, cosas no veredes y comieres que non crederes si los platos non fregueres, y, ¡ por Júpiter que no vuelve a ocurrir!



Después, una lírica singladura -por circunstancias incompleta- para bajar el bicho, unas birras y a dormir, previo paseo y compras por el chinatown  de Torredembarra



Hay quien también se puso "morao" gracias a su amigo Pepe






23 SÁBADO.  09:30
Una divertida regata: salida los primeros, continuamos así, hasta que Sergi, apoyado por Jaume, confundió la boya (más bien la olió), que a mi me pareció que no era, pero,  por la insistencia, arrumbamos hacia ella hasta darnos cuenta del error (espejismo):  a una milla -por nuestro través de babor-  la buena. ¡Manda huevos que usen boyas para las nansas iguales que las de las regatas (de lejos). Al final, cerca de la llegada calma chicha, retirada y al papeo, sobremesa y chupitos, disimulando nuestra envidia al narrarnos César las prestaciones del Estupendus.

Sergi, del mundillo de la sanidad, nos ha recomendado cambiar la cerveza por el vino


La vida resumida en cuatro botellas
                                                                                     




2 comentarios:

  1. qué dura la vida del navegante, cuánto sufrimiento. Lo pagaréis en colesterol y régimen estricto de parte de la seguridad social.

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  2. Tiene toda la razón del mundo el primero anónimo. ¡Como demonio se puede vivir una vida tan dura!
    El navegar es duro, muy duro, pero comerse un cochinillo, debe ser la releche.
    Un abrazo, Ramón y deja algo para los demás.

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